Césped natural frente a césped artificial: ¿Cuál es mejor?

30 de julio de 2019 | Hierbapublicado por Sasha

Cuando el césped sintético apareció por primera vez en escena en la década de 1950, algunas personas creían que la hierba artificial sustituiría a la hierba natural como estándar para el césped. De hecho, las empresas fabricantes de plástico y material sintético especulaban con que el césped "perenne" podría eliminar la práctica de cortar, regar y rastrillar el césped en las zonas residenciales.

Sin embargo, el tiempo ha demostrado que esta sustitución nunca se ha producido, y el césped natural sigue siendo el estándar para céspedes bonitos y bien cuidados. Si nos fijamos en las principales ventajas del césped natural frente al artificial, entenderemos por qué la opción natural es la ideal para las propiedades.

Consideraciones clave para elegir entre césped natural y artificial Césped artificial

Aspecto y textura

El césped natural tiene un color, un tacto y un aspecto general exuberantes. Como la hierba es un organismo vivo, libera oxígeno de forma natural y puede animar el aspecto de una propiedad. Y para algunas personas, no hay nada mejor que el vibrante olor de la hierba recién cortada.

En cambio, muchas personas no pueden superar el aspecto y el tacto del césped artificial. Mientras que el césped natural de alta calidad tiene un tacto excelente, el sintético puede producir un crujido desagradable y sonidos poco naturales. El césped natural también puede ofrecer una mejor tracción que el artificial (que crea un tipo de "supertracción" que puede resultar resbaladizo para algunos tipos de calzado).

Además, el césped natural se integra mejor en el paisaje y la flora del entorno. Por ejemplo, los céspedes naturales se adaptan al clima regional y resultan atractivos tanto a la sombra como a la luz del sol, siempre que se cultiven en las condiciones lumínicas requeridas. Para conseguir un aspecto similar con el césped artificial, hay que comprar una versión de gama alta mezclada con briznas multicolores para imitar la vegetación natural. Tampoco hay garantías de que el césped artificial funcione bien bajo la luz del sol o en condiciones climáticas diferentes.

Coste

Muchas personas se sorprenden al saber que la instalación de césped artificial cuesta bastante más que la de césped natural. La razón es que el césped artificial requiere que un contratista desentierre el antiguo jardín o césped, vierta y coloque capas de arena e instale pellets de caucho para estabilizarlo. Tras este proceso, el propietario debe comprar el césped artificial para su instalación.

Supongamos que desea instalar un césped artificial de alta calidad que no parezca un proyecto de feria de ciencias. En ese caso, deberá desembolsar una buena cantidad de dinero. La contratación de contratistas para este proceso también requiere un presupuesto, y las reparaciones por césped artificial mal instalado también pueden sumar. También es importante tener en cuenta que, si alguna vez decide dejar de utilizar césped artificial, su eliminación al final de su vida útil es mucho más cara que la del césped natural.

En cambio, la instalación o mejora del césped natural tiene un coste menor. Para ser justos, el césped natural incurre en gastos continuos de siega, riego y control de plagas. Sin embargo, un informe de la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA) concluyó que los precios combinados tienden a ser más bajos en general para el césped natural.

Medio ambiente

El césped natural también puede tener ventajas ecológicas y sanitarias sobre el artificial. Para empezar, el césped natural es una planta que absorbe dióxido de carbono y libera oxígeno para que respiren los seres humanos y los animales. El césped natural actúa como filtro biológico de las aguas subterráneas y alberga microorganismos que descomponen los residuos orgánicos. El césped natural tiene un efecto refrescante sobre el medio ambiente y puede ayudar a reducir el impacto de la erosión del suelo.

En cambio, el césped sintético no libera oxígeno ni descompone los residuos orgánicos. Mientras que el césped natural actúa como refrigerante, el artificial absorbe y atrapa el calor, lo que se traduce en mayores costes de aire acondicionado. Si los pesticidas utilizados en el césped natural son motivo de preocupación, los tratamientos antimicrobianos utilizados en el césped artificial también entrañan riesgos. Estos tratamientos antimicrobianos pueden ser tóxicos para el medio ambiente.

De hecho, la Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo aconseja que los contratistas no respiren la arena utilizada para instalar césped artificial debido al riesgo de lesiones pulmonares retardadas. Aunque una clara ventaja medioambiental de la producción de césped artificial es que puede utilizar materiales reciclados, el césped sintético nunca puede descomponerse por sí solo. Si el propietario no recicla, el césped sintético acabará en un vertedero al final de su vida útil. Por el contrario, el césped natural se repara y regenera a sí mismo, fomentando un ecosistema sano y próspero en el suelo en el que se planta.

Conclusión

Tanto el césped natural como el sintético presentan ventajas prácticas y algunos inconvenientes. En conjunto, sin embargo, la comparación demuestra que no hay sustituto adecuado para el césped fresco, vibrante y natural. Contactar con The Grass Outlet con cualquier pregunta o haga hoy mismo su pedido en línea.